¿Cuántas veces vas caminando por la calle, escuchas la música de una tienda y no puedes evitar entrar? O que pasas por una panadería y solo el olor a pan recién horneado te recuerda a las reuniones en casa de la abuela compartiendo en familia. ¿No te has descubierto alguna vez cogiendo algún producto de los que exponen en las cajas de los supermercados? O llegas a un lugar y los colores de su decoración, la disposición del mobiliario te relaja casi al instante…
Ese es el poder del neuromarketing, del que estoy segura de que ya has oído hablar o habrás leído. ¿Y de qué se trata? De técnicas de neurociencia aplicadas al marketing en contextos muy bien estudiados para facilitar la compra, donde se crean estímulos sensoriales –perceptibles o no- y que pretenden influir en el comportamiento de los consumidores y los usuarios de servicios. Y es por ello que cada vez más se recomiendan estrategias de neuromarketing para aplicarlas en las empresas, en los negocios y en los eccomerce.
Y ahora te pregunto, ¿has pensado alguna vez cómo el neuromarketing aplicado en tus redes sociales pueden ayudarte a fidelizar tu comunidad de usuarios o acercarte más a tus potenciales clientes? Como Community Manager, dedicada a la gestión de redes sociales de distintas marcas, productos y servicios, en este post quiero contarte algunas estrategias efectivas de neuromarketing que puedes utilizar en tus redes sociales.
¿Qué es el neuromarketing?
El neuromarketing estudia el comportamiento humano durante el proceso de compra: desde las necesidades por un producto o un servicio, a cómo elegirlo entre la diversidad ofrecida por la competencia, hasta el paso decisivo de cerrar la compra. Su objetivo es conocer de la mejor manera posible los niveles de atención que muestran las personas a diferentes estímulos, y cómo éstos pueden ser aplicados a los procesos de venta.
Un dato muy elocuente y demostrado empíricamente: un consumidor toma la decisión de compra en sólo 2,5 segundos y el 95% de dicha decisión se toma en el inconsciente, de modo que se producen grandes diferencias entre lo que el consumidor dice, siente y finalmente hace. ¿Ves por qué es importante comprender cómo funciona la mente de los consumidores a fin de mejorar las técnicas de marketing y la experiencia de usuario?
Si quieres saber más sobre neuromarketing, te invito a ver el siguiente vídeo de Patrick Renvoise, experto internacional en la materia:
El neuromarketing como estrategia de comunicación
Esta manera de abordar la mente humana sirve también para explorar vías más eficaces en estrategias de branding de marcas. ¿O creías que las grandes marcas no tienen estudiado al milímetro los colores corporativos, la música de sus anuncios, la tipografía de sus folletos? El neuromarketing ayuda a conocer qué tipo de estímulos impactan más y mejor en las personas, cuál es el peso de los factores inconscientes en las decisiones de compra, cuáles son las razones que hacen que a una persona le guste un determinado producto, servicio o marca frente al de la competencia.
Y algo muy importante: también permite realizar predicciones sobre el posible comportamiento de los consumidores, y que son luego utilizadas en campañas de marketing exitosas. Esto es fundamental en una sociedad en la que la presencia masiva de la publicidad es algo completamente normal. Estamos siendo “bombardeados” constantemente de mensajes publicitarios. La competencia por captar nuestra atención es cada vez mayor, y no digo ya la de intentar convencernos de comprar el producto o utilizar el servicio.
Una marca que consiga llamar la atención de las personas tendrá un mayor poder de atracción. Y para conseguirlo, el trabajo de persuasión debe hacerse con planificación y con estrategias que involucren a todos los canales de comunicación, tanto en el offline como en el online (y eso incluye, indiscutiblemente a las redes sociales).
Es lo que yo llamo “planificación integral omnicanal”, es decir, con el cliente en el centro de su estrategia (diferente a la planificación multicanal, enfocada en maximizar el rendimiento de cada canal de comunicación de la marca, tanto físicos como digitales). El objetivo de la planificación integral omnicanal es crear una mejor experiencia del usuario, que ayude a proyectar una imagen de marca en la cabeza de las personas acorde con sus valores, lo que lleva a fidelizarlos y a incrementar la probabilidad de compra.
Al final lo que se busca es una diferenciación entre tanta competencia y el excesivo ruido de información. Hay campañas costosas que se pueden permitir las grandes empresas, pero cuando se trata de comunicación por redes sociales casi cualquier técnica de neuromarketing es asumible por cualquier empresa, grande, pequeña o mediana.
El neuromarketing aplicado en las redes sociales
Las empresas mayormente se han enfocado en utilizar las técnicas del neuromarketing en sus establecimientos, en la publicidad o en sus webs, y el reto ahora es hacerlo en sus redes sociales. Les cuento algo: para preparar este artículo busqué información sobre las empresas que se dedican al neuromarketing en España, con la idea de ver sus webs y, muy especialmente, sus redes sociales. Partía de la hipótesis: conocen y manejan las técnicas, ergo las aplicarán en sus canales de comunicación. ¿Saben qué encontré? Empresas que ofrecen servicios de neuromarketing y que: usan sus redes sociales solo para difusión de eventos y de contenidos del sector, o las tienen desactualizadas o ni siquiera tienen RRSS.
Sin lugar a dudas, esto me confirma la necesidad de dar un paso más en el marketing digital. El consumidor de hoy en día espera productos, comunicaciones y redes sociales que despierten sus sentidos, que los emocionen y que estimulen su mente. No es una tarea fácil: no es lo mismo entrar a una tienda física que guiarte por lo que las redes sociales de esa tienda tratan de comunicarnos, de transmitirnos. Y hacerlo de manera coherente y consistente en todos los canales de comunicación de la tienda.
Vamos entonces a dar 10 estrategias de neuromarketing que podemos aplicar a nuestras redes sociales. Por supuesto, hay muchas más, tantas como empresas existen pues cada una debería diseñar su propia estrategia, basándose en su producto o servicio, su cliente ideal, los canales de comunicación con los que cuenta, el presupuesto con el que cuenta, las personas encargadas para aplicarlas, etcétera. Apuntemos estas como ideas que nos ayuden a crear estrategias propias.
1. La primera impresión de tus redes sociales es la que cuenta
Qué importante es ver una red social y que te guste cómo está diseñada, desde el nombre, hasta la foto de perfil y de portada (según la red que estemos viendo), una primera impresión de los contenidos, los colores, si usa o no fotos y vídeos, claridad de los textos… Que logre transmitir confianza al usuario, cierta credibilidad inicial. Por eso es fundamental cuidar cada detalle de las redes sociales de la empresa, y que estén en sintonía con la web (si tiene) y muy especialmente con los valores y el mensaje que quiere comunicar. ¿Entrarías a un negocio con mucho ruido, sucio, olores poco agradables y el personal mal encarado? Pasa lo mismo en el mundo digital.
2. Muestra confianza para obtenerla de tus usuarios y potenciales clientes
¿Quieres que tus clientes crean en tu producto o tu servicio? Pues debes dar muestras de que confías en ellos. Las redes sociales son bidireccionales y la atención a tus usuarios debe ser tu prioridad si quieres que formen parte permanente de tu comunidad. Interactúa con ellos, responde los mensajes, atiende las quejas o las dudas. Utiliza un lenguaje sencillo y claro siempre; puedes ser más informal o más formal, pero que se entienda y que se sientan parte de tu comunidad.
3. Usa herramientas como el Marketing emocional y el Storytelling
Así lograrás conectar con tus usuarios desde la emoción y los sentimientos, con el fin de convertirlos a futuro en “lovemark”, a través de la empatía, la identificación y la fidelidad. Eso que se dice de crear vínculos emocionales profundos y duraderos con los consumidores, desde hacer que se identifiquen con la marca y aumentar el engagement, hasta convertirlos en fans incondicionales y embajadores de marca. Cuenta una historia, pues crean un vínculo de confianza con la marca y ayudan a instalarse en la memoria de los consumidores.
4. Crea tu propio estilo de comunicación en redes sociales
¿No te ha pasado que a veces lees un tuit, una entrada en LinkedIn, Instagram o Facebook y sin leer el nombre te “suena a alguien” o a una marca? Lograr eso es muy difícil, pero no imposible. Se requiere claridad en los objetivos de comunicación, coherencia y constancia. Y muy especialmente ser originales, no imitar a otros. Puedes ayudarte de ciertas frases, de emoticonos, de hashtag, de los colores de tu marca…
5. Adecúa el mensaje para alentar al consumidor a tomar una acción
El tipo de mensaje que utilizas en tus redes sociales tiene influencia en las acciones que toman los consumidores. Si quieres fidelizarlos, lo primero que tienes que tener muy claro es que las redes sociales no son un canal de venta directa. Para eso existe la publicidad, el marketplace de FB, Instagram Shopping, Rich Pins de Pinterest o redes de venta estilo Wallapop, Vinted, etcétera. Lo mejor es que sigas la regla del 80/20, es decir, el 80% de tu contenido en redes sociales debe ser no promocional. ¿Y qué hacer para convencer a un cliente de que tome una acción? La clave es: mensajes sencillos y fáciles de leer. Cuánto más complicado sea perciba hacer algo, menor es la probabilidad de que las personas tomen una acción.
6. Publica mensajes evocadores para que los clientes recuerden la información
El neuromarketing usa técnicas que activan la memoria, el recuerdo. Como es imposible (a día de hoy, claro) utilizar estímulos olfativos o táctiles en las redes sociales, un manera de inducirlos es con descripciones, juegos de palabras, historias, acompañados de imágenes o vídeos.
7. Usa la mirada para dirigir la atención del cliente
Al elegir una imagen de una persona o animal para acompañar una publicación, procura que estos estén mirando directamente al producto o frase que tú deseas. Se han hecho estudios donde se ha comprobado que si la imagen contiene a una persona o animal mirando al frente (a quien la ve), nos concentramos es su cara, su gesto. Si quieres que el cliente se concentre en el producto o el mensaje, pues que la mirada de la persona o el animal esté dirigida allí.
8. Apela a los sentimientos y a las emociones usando los colores
¿Quieres colarte en la mente del consumidor y animarle a tomar decisiones? Provocarle sentimientos (risa, amor, solidaridad…) mediante el uso de colores y de la iluminación en las imágenes o vídeos que compartas en tus redes sociales funciona a la hora de llamar su atención. El verde lo asociamos inconscientemente a lo ecológico, lo sostenible, la salud, el medioambiente. El rojo a la pasión, el amor, fuerza, valentía… El azul tranquilidad, paz, armonía. Y no me refiero a los colores de la marca (esos siempre), sino a jugar con toda la gama de colores en momentos puntuales o épocas del año, o en campañas específicas.
9. La música es una gran aliada para tus vídeos
¿Sabías que el oído, después de la vista, es el sentido que nos da mayor información sobre el mundo que nos rodea? De allí que haya surgido también el llamado neuromarketing auditivo. El más frecuente de sus usos la música de las tiendas: en función de la música, compraremos más o menos, más rápido o más lento. Por eso, bien elegida, la música puede influir en el comportamiento de un consumidor. Incluso, puede hacer que al escuchar una melodía concreta le recuerde una marca y una emoción ligada a ésta.
10. La coherencia fortalece la relación con los clientes y refuerza la marca
Quiero insistir en lo que llamo “planificación estratégica omnicanal”: si vas a lanzar una campaña especial o tienes un evento, procura que haya armonía y coherencia en todos los canales de comunicación de la marca, producto o servicio. Tanto en la tienda física (si la hay), la web, los folletos, la publicidad, el merchandising, las redes sociales. Hacer el lanzamiento en el mismo momento y con las frases clave en todos los canales, adaptando el mensaje a las peculiaridades de cada uno. De esta forma se acorta el tiempo de aprendizaje, los clientes estarán más propensos a hacer una compra y se acelera la toma de decisiones en el proceso de compra.
11. Siempre con una sonrisa (10 + 1, porque no se debe dejar de lado esta recomendación final)
No solo en las imágenes o los vídeos que compartas en tus redes sociales, también intenta transmitir a tu comunidad que está en un ambiente cordial, ameno, como en su casa. Y qué mejor que una sonrisa. Humanizas tu marca y ayudas a crear sentido de pertenencia. Además, hay estudios que demuestran que las imágenes con personas sonrientes mejoran el estado de ánimo y la disposición a comprar. Recuerda: las lovemarks serán las marcas y empresas que logren crear lazos genuinamente afectivos con las comunidades y redes sociales en las que se desenvuelvan.
Si crees que se podría añadir más estrategias a la lista o bien te apetece comentar alguna de las que expongo, ¡no dudes en dejarme un comentario! Estaré encantada de leerte y entre todos podemos ayudarnos con ideas. Por ejemplo, comentar ejemplos específicos en los que has visto usar con éxito las técnicas de neuromarketing en una red social. O que tú hayas utilizado. Yo te invito a hacer de esta nueva web tu casa y que en la zona de comentarios de cada artículo podamos sentirnos a gusto para intercambiar impresiones, convertir la web en una comunidad de aprendizaje donde ganemos todos.
Conclusiones
Todos sabemos que aplicar eficazmente estrategias de neuromarketing en nuestros canales de comunicación no es fácil, más si se trata de redes sociales. Pero no es imposible. Es un desafío que, si amas tu marca, producto o servicio y quieres lograr mayor conexión con tu comunidad, querrás intentarlo. Es una labor que se rige por la prueba y el error, por tanto no nos podemos olvidar de monitorizar. Debemos ir probando diferentes estrategias, medirlas y saber si han funcionado o no. Los datos nos dirán lo que debemos hacer, lo que no debemos repetir o lo que hay que cambiar.
El consumidor quiere conocer la marca lo mejor posible antes de tomar la decisión final de compra. Las redes sociales deberían ayudar a conseguirlo. El neuromarketing nos proporciona técnicas que lo harían posible. Y nosotros, los que gestionamos y trabajamos con las RRSS, debemos intentarlo, adaptarnos a las necesidades de un mercado sobresaturado y experimentar hasta lograr dar con lo que nos funciona, con lo que nos acerca más y mejor a nuestros clientes. Todo un reto, ¿verdad?
Por @SEOdeCanarias
Gracias
Una ayuda para todo visionario en cualquier área de la comunicación.